sábado, 5 de marzo de 2011

ARISTÓTELES COMO PEDAGOGO


CHISTE: un maestro le dice a su alumno: jovencito a tu edad, Alejandro magno 
ya había conquistado el mundo. El alumno le responde:
Sí, pero tenía de maestro a Aristóteles.


Aristóteles ha sido un personaje sorprendente, por la gran cantidad de temas que investigó, temas que no solamente eran de carácter filosófico, sino que también fisiológicos, zoológicos, astronómicos, físicos, literarios, retóricos, psicológicos, teológicos, sexológicos, políticos y pedagógicos. Fue un verdadero amante del saber y coleccionista (le gustaban los catálogos) ¿Cómo es que tuvo tiempo para tantas cosas?

Se sabe que fue preceptor de Alejandro Magno, estudió filosofía y otras disciplinas en la academia de Platón donde tenía como condiscípulos a esclavos que más tarde, al graduarse, fueron liberados y se convirtieron en pedagogos.

Después de que Aristóteles había salido de la academia, Filipo, su amigo de la infancia, lo llama para que eduque a su hijo. Alejandrito Magno era un niño díscolo y problemático; ya había tenido varios maestros que no lo soportaron. Pero Aristóteles no solamente era un simple maestro, sino además, filósofo y pedagogo.

El problema educativo de Alejandro es que creía que era hijo de un dios (quizá Zeus) y creció con esa idea que le implantó su madre Olimpia, la cual era una mística; por lo tanto no podía aceptar ningún conocimiento, porque ya lo sabía todo.

Primeramente lo que hizo Aristóteles fue conocer al niño, sus creencias y sus actividades, involucrándose en los aspectos de la familia para poder realizar el diagnóstico adecuado y planear un método de enseñanza. Y para eso recurrió a Homero, Sócrates y Platón.

Aristóteles le dijo a Alejandro, de una manera irónica y retándolo: Tienes que hacer cosas para demostrar tu divinidad, además de que ya sepas todo, porque eres hijo de un dios, (sin destruirle esa creencia, sino reafirmándosela; además sonaba muy poético y platónico). Pero como encarnaste en humano estás limitado y no puedes recordar toda la omnisapiencia de los dioses. Esta es la enseñanza de la teoría del la anámnesis de Platón, porque él decía que provenimos de la divinidad, de un topos uranos en el mundo de las ideas y que en esa existencia vimos y supimos todas las cosas, pero cuando nacimos en un cuerpo físico, se nos olvidaron.

Primero recurrió a Homero, diciéndole que como dios que era, seguramente lo inspiró para que escribiera la Ilíada y la Odisea, (es en ese momento cuando empieza su verdadera vocación) y le dijo que como iba hacer hombre y dios al mismo tiempo, sus hazañas tendrían que ser más importantes que las de los protagonistas homéricos, pues como Aquiles conquistó Troya y era mortal, entonces como Alejandro era un dios tendría que llegar hasta el fin del mundo en sus conquistas y le explicó que dominaría, pero no matando gente como lo hacía su supuesto padre Filipo, sino con sabiduría,  bondad y grandeza moral, (Aristóteles hacia énfasis en la educación de la virtud)

Además, el estagirita le propuso que como ya sabia todo, él le iba a hacer las preguntas y Alejandro se las iba a responder, (es la aplicación de la mayéutica) de esa manera Alejandro comenzó a ser moldeado por las preguntas socráticas de su preceptor.

Como Alejandro se rendía culto así mismo y oficiaba como sacerdote y se ofrecía incienso que le compraba su mamá; Aristóteles le comentó que ese bálsamo e incienso venían de Persia y de Arabia y que si quería conquistar esos reinos tendría que estudiar toda su cultura, de esa manera es como lo guió y lo condujo, “pues eso es la pedagogía”, nunca le enseñó nada, pero analizó bien el problema que enfrentaba para darle una educación personalizada, sus creencias, valores, actitudes, aptitudes y su diferencia individual.

La educación intelectual en Aristóteles era evidente (condenaba el trabajo manual y las artes mecánicas) y así es como formó a Alejandro como un hombre culto, es por esa razón que 327 ciudades llevaron su nombre.

Aristóteles le decía: si eres dios vas a hacer esto y aquello, aprenderás estas cosas, vas a conquistar el mundo. De esa manera desarrolló su potencial latente por medio de la educación, el conocimiento y la virtud, fue una mayéutica pedagógica que no solamente dio luz a ideas, sino a un hombre idealizado con un proyecto de vida que supo alcanzar su verdadera vocación.