En su afán de abarcarlo todo, cada vez más, la filosofía ve en distintas direcciones, diferentes ámbitos, escenas, fenómenos, perspectivas. Últimamente está dirigiendo su mirada hacia la televisión, se están llevando a la pantalla chica series inspiradas en cuestionamientos que filosóficamente pueden ser analizables. Con Lost, Dr. House, Battlestar Galactica y los Simpson.
Existen héroes y villanos de los comics y la televisión que con su conducta y forma de ser y de pensar pueden encajar en algunas visiones filosóficas de ciertos pensadores. Por ejemplo el antihéroe en Batman, con una visión lúdica y sarcástica del mundo es el “Guasón” o Jocker portador de una filosofía personal del “sin sentido” nihilista (desde que en la Ilustración se dio un acendrado antropocentrismo). Se ha dicho que este personaje evoca la filosofía de Derrida quien, a su vez se ha inspirado en Nietzsche, Freud y Heidegger.
El Jocker retoza el juego del mundo donde hace de lado los conceptos de verdad, esencia y moral dirigiéndose al objeto del sin sentido o de la maldad demencial a la cual se adhiere. Además es jocoso, inmoral, caótico, orgulloso, violento, egoísta, burlón, sobre todo burlón. Carece de empatía, mata por placer, no le tiene miedo a la muerte. Su problema de personalidad: carece de orígenes y se ha inventado así mismo.
Pero por qué es así el Jocker, que cosa es lo que lo orilla a mostrar esa conducta maligna, que tipo de vida y experiencias lo impulsaron a ser de esa manera. Cuenta él que su padre era un alcohólico que golpeaba a su mamá y en una ocasión, con navaja en mano, el padre le preguntó: “por qué tan serio” y en ese momento le cortó la boca haciéndole esa sonrisa tan burlona y característica que muestra siempre amenazante y grotesca.
Existen héroes y villanos de los comics y la televisión que con su conducta y forma de ser y de pensar pueden encajar en algunas visiones filosóficas de ciertos pensadores. Por ejemplo el antihéroe en Batman, con una visión lúdica y sarcástica del mundo es el “Guasón” o Jocker portador de una filosofía personal del “sin sentido” nihilista (desde que en la Ilustración se dio un acendrado antropocentrismo). Se ha dicho que este personaje evoca la filosofía de Derrida quien, a su vez se ha inspirado en Nietzsche, Freud y Heidegger.
El Jocker retoza el juego del mundo donde hace de lado los conceptos de verdad, esencia y moral dirigiéndose al objeto del sin sentido o de la maldad demencial a la cual se adhiere. Además es jocoso, inmoral, caótico, orgulloso, violento, egoísta, burlón, sobre todo burlón. Carece de empatía, mata por placer, no le tiene miedo a la muerte. Su problema de personalidad: carece de orígenes y se ha inventado así mismo.
Pero por qué es así el Jocker, que cosa es lo que lo orilla a mostrar esa conducta maligna, que tipo de vida y experiencias lo impulsaron a ser de esa manera. Cuenta él que su padre era un alcohólico que golpeaba a su mamá y en una ocasión, con navaja en mano, el padre le preguntó: “por qué tan serio” y en ese momento le cortó la boca haciéndole esa sonrisa tan burlona y característica que muestra siempre amenazante y grotesca.